¡Resolvemos todas las preguntas frecuentes sobre las croquetas!

¡Las adoramos en todas sus formas! Y, sin embargo, no siempre es fácil que queden perfectas. Son muchos temas a tener en cuenta: la bechamel, el rebozado, el congelado, su conservación, la fritura… Para que nada salga mal, a continuación, respondemos algunas preguntas frecuentes sobre croquetas: ¿Se puede congelar la masa de croquetas? ¿Por qué se abren? ¡Despejamos todas tus dudas! 

 ¿Se puede congelar la masa de las croquetas? 

A la hora de prepararlas, esta es una de las preguntas recurrentes, ya que suele salir una cantidad mayor de las que vamos a hacer en el momento. La respuesta es afirmativa: sí que se puede congelar la masa de las croquetas, siempre que no las hayas frito previamente. Para que duren varios meses, por tanto, lo único que debes hacer es darle la forma a la masa y meterlas al congelador.  

No obstante, a nadie se le escapa que todo este proceso lleva un tiempo del que no siempre disponemos. Preparar la bechamel, hacer la masa, dar forma, rebozar las croquetas… ¡Es un proceso laborioso! Por ello, si eres un amante de este plato pero no puedes permitirte emplear toda una mañana en prepararlas, las croquetas congeladas  de La Cocinera son para ti. Estarán listas en tan solo cuatro minutos, y podrás elegir entre una amplia variedad de ingredientes que no siempre tenemos a mano en casa, como pollo estofado, cocido y jamón o bacalao a la cazuela. 

Con el tiempo sobrante, podrás aprovechar para preparar el acompañamiento ideal de tus croquetas. Así, dejarás con la boca abierta a todos los comensales, incluso a los que cuentan con un paladar más exigente. Dependiendo del tipo de croquetas que hayas elegido, puedes elegir guarniciones como salmorejo, gratín de patata, crema de calabacín o ensaladilla de gambas. ¡Conquistarás a mayores y pequeños! 

¿Por qué se abren las croquetas? 

A todos nos ha pasado alguna vez, a la hora de freírlas, que no entendemos por qué se abren las croquetas. La respuesta más habitual a esta cuestión es que el aceite no estaba a la temperatura adecuada. Si no las sellamos con el primer golpe de calor, la masa tiende a salirse. El truco para que tus croquetas queden perfectas, ya sean de jamón serrano o de espinacas y queso, es echarlas en aceite a 175ºC. 

Eso sí, no te pases con la temperatura, ya que podrías correr el riesgo de quemarlas por fuera y dejarlas congeladas por dentro. Si quieres saber cómo encontrar el punto del aceite (si no tienes un termómetro de cocina), es introducir un palillo de madera en la sartén. Cuando salgan burbujas grandes y rápidas, está listo. 

Otras pautas generales que debes seguir, para que tus croquetas queden de cine, es emplear un aceite de buena calidad, como el de oliva, y freírlas a una temperatura adecuada para que absorban la menor cantidad de aceite. Después, lo ideal es que las coloques sobre un papel absorbente al sacarlas de la sartén, y eliminar así el aceite sobrante. Una vez que estén secas, las pondremos en un plato distinto para que no queden grasientas. 

Con estas recomendaciones, esperamos haber respondido a las preguntas frecuentes sobre croquetas que todos tenemos al prepararlas. Ahora que ya sabes que se puede congelar la masa de las croquetas, eres consciente de por qué se abren las croquetas al echarlas a la sartén y conoces cómo freírlas para que queden perfectas … ¿por qué no te animas a darles un toque gourmet? Puedes preparar las de bacalao con salsa vizcaína, las de espinacas y salsa de pimientos del piquillo, las de jamón ibérico con salsa de oporto o las de cocido y humus de garbanzos. ¡Este plato ya no tiene misterios para ti!